Por David Uriarte  /

 

Un lugar de difícil acceso y transito es la odisea que hace años inició Gerardo Vargas Landeros, visto desde cualquier ángulo, el camino tiene algunas pendientes descendentes y otras ascendentes, sin embargo, las afirmaciones que ubican a Vargas Landeros como una pieza valiosa en el proceso electoral del 21, o las afirmaciones que lo descartan; ambas tienen razón.

La competencia pasional siempre tiende a la descalificación y la racional a la evaluación, por lo tanto, las emociones personales y de grupo se aglomeran, identifican y consolidan en un macizo a veces irracional pero fuerte al fin, sin embargo, la racionalidad cumple con las funciones propias de un cerebro sano; la planeación, la previsión, el lenguaje y la libertad.

En esta ruta crítica del 21, la planeación la inició Gerardo Vargas hace más de veinte años, durante el trayecto, la previsión ha percibido los cambios necesarios de ruta, y hasta donde es posible, ha mantenido la cohesión de sus seguidores.

“Horcón del medio” en las odiseas políticas, es la información sensible que reciben los electores, es la materia prima que alimenta la conciencia y construye la intención o rechazo a la hora de votar, por eso, todos los aspirantes buscan la pócima que hipnotice la voluntad del que elije.

La cuarta variable a la hora de elegir, es la libertad. Éxitos y fracasos cuelgan de la libertad, la frase de que “el pueblo tiene el gobierno que se merece”, lo que describe es que el pueblo tiene el gobierno que elige, y entre merecimiento y elección hay una diferencia abismal.

La lógica popular observa una serie de eslabones que soportan la aspiración de Gerardo Vargas, actores de la política nacional y local, entre ellos José Fernando González Sánchez, Manuel Cárdenas Fonseca, Héctor Melesio Cuén, algunos exgobernadores y otros más que harán sinergia en un proyecto por muchos conocido.

El trabajo de las Redes Sociales Progresistas, trae de tiempo completo al aspirante por la gubernatura de Sinaloa en la organización de las asambleas que deberán cumplir su objetivo antes que termine este año. Que no se les olvide a los puristas de la política, que el proceso electoral del 21, es local.