Por David Uriarte /           

Mientras la visita de Claudia Sheinbaum Pardo a la capital sinaloense tuvo un desarrollo diferente a la visita de Adán Augusto López Hernández, la pregunta obligada es ¿Y cuándo visita Sinaloa Marcelo Luis Ebrard Casaubón?

López Hernández estuvo en el Congreso del Estado, Claudia Sheinbaum en el auditorio principal de la Universidad Autónoma de Sinaloa, y Marcelo Ebrard seguramente lo hará en algún empaque o campo pesquero acompañado de sus amigos empresarios.

Poco a poco se van sedimentando las pasiones y distribuyendo las preferencias, Adán Augusto y Héctor Melesio Cuén ya forman parte de una asociación evidente, a Claudia Sheinbaum se le puede asociar con la clase sindical, con todos y con nadie.

 

La presencia de líderes sindicales del IMSS, y del magisterio, son elementos para darle vuelo a la imaginación más que al análisis, la comida con la clase empresarial, con los promotores de la economía en el Estado… Estuvo cuidada por ambas partes, la lista fue reducida a 25 invitados y los que llegaron y no estaban en la lista tuvieron que esperar afuera o retirarse.

Algunos de los empresarios esperados no llegaron, otros mandaron a su representante, todo transcurrió en orden y el tema político electoral no fue tocado por obvias razones. Todo giró alrededor de las maravillas administrativas para quienes quieran invertir en la Ciudad de México donde hoy los tramites se redujeron de cincuenta requisitos a cinco, algo parecido a lo que en su tiempo hizo Jesús Vizcarra cuando fue presidente municipal.

La presencia y el discurso del gobernador Rocha en todo momento fue de apertura institucional, siempre se mantuvo firme en el objetivo de la visita, aunque hay algo que se llama “valores entendidos”.

De alguna manera la promoción económica de la Jefa de Gobierno de la CDMX, lleva implícito un mensaje que en el fondo no le conviene al Sinaloa, es decir, en todo caso la promoción o la oferta para invertir por parte de los empresarios sinaloenses sería en su estado no en otro lugar. Sin embargo, también se entiende que el tema sólo fue el mejor pretexto para reunir a la clase empresarial de Sinaloa.

Algunos de los asistentes locales y de otros municipios salieron con buen sabor de boca de la comida, parte del postre consistió en dulce de calabaza, un platillo típico de Sinaloa y especialmente de Badiraguato.

¿Y Marcelo?