Por David Uriarte /
En teoría, la prioridad del gobierno federal es el cumplimiento de sus políticas públicas, la frase “primero los pobres”, debe ser honrada con acciones que así lo indiquen, y los tres principios que guían al Presidente y su régimen político: no mentir, no robar, y no traicionar al pueblo, deben quedar de manifiesto en toda la estructura gubernamental.
Parece que el desespero por ganar simpatía entre los votantes de México, hacen de Claudia Sheinbaum, Marcelo Ebrard, y Adán Augusto López, una caricatura de su desempeño, se burocratizó la política pública, atienden la oficina y desahogan la agenda de lunes a viernes, y el fin de semana programan reuniones municipios, con sectores representativos de la población para promover su imagen y su proyecto rumbo a las elecciones del 2024.
El fin de semana pasado, el Director General de Enlace con Gobernadores y Alcaldes de Gobernación, Arturo Ávila, estuvo trabajando en el municipio de Guasave, coordinando los trabajos para ‘planchar’ la parte operativa del Secretario de Gobernación cuando le toque su turno por Sinaloa.
Arturo Ávila, sostuvo encuentro el domingo por la noche en el noticiero televisivo de Milenio, estuvieron los representantes de Sheinbaum, Ebrard, y Monreal, se le vio con prudencia cosa que le falto al representante de Ebrard, aunque de plano, el más centrado en el debate fue Alejandro Rojas Díaz Durán, amigo de Monreal, dijo que faltan reglas claras para operar rumbo a la famosa encuesta que decidirá quién será el o la candidata de MORENA para la Presidencia en el 2024.
Están muy movidos, muy activos, se desplazan por toda la república en búsqueda de la simpatía y la intención del voto, ¿Y las prioridades nacionales?
Concretamente en Sinaloa, los productores agrícolas, la Universidad Autónoma de Sinaloa, los trabajadores del sector Salud, la ola de homicidios, y otros temas urgentes que requieren del apoyo incondicional al gobernador Rocha Moya… el gobernador solo no puede, no tiene el dinero suficiente para solucionar los problemas que se solucionan con dinero, requiere de apoyo claro y contundente, no de discursos que alarguen los problemas y polaricen más las cosas.
La inconformidad de los periodistas por los resultados en el asesinato de Luis Enrique Ramírez, y la inconformidad de los agricultores por el precio de garantía: esa es parte de la prioridad.
