Por David Uriarte /

La democracia busca equilibrio de voces y pensamientos a través de la participación ciudadana en las urnas, construye las representaciones en los congresos estatales y de la Unión, en Sinaloa, la transición democrática viene de la mano con la irrupción de cuadros políticos nuevos -emergidos de corrientes políticas distintas a las tradicionales- tal es el caso del Presidente de la Mesa Directiva de la actual legislatura Gene René Bojórquez Ruiz, un joven arraigado en el PAS, producto de la escuela política de Héctor Melesio Cuén Ojeda.

Cuando se habla de equilibrio en el poder legislativo, se habla de la estabilidad generada por las fuerzas partidistas que confluyen en el punto de interés partidista, sin sobresaltos legislativos más allá de las diferencias propias expresadas en exabruptos verbales producto del color que representan, en la actual legislatura se han dicho de todo, pero al final ha prevalecido la cordura y la invitación permanente al respeto mutuo entre iguales.

No se puede negar el colmillo o experiencia del presidente de la Junta de Coordinación Política, Feliciano Castro Meléndrez, de MORENA; como tampoco se puede negar la inteligencia político-parlamentaria del presidente de la Mesa Directiva Gene Bojórquez, del PAS, esta mancuerna mantiene el rumbo de la legislatura, aunque apenas van 22 sesiones, reza el dicho que por la víspera se saca el día.

Lidiar con intereses encontrados o distintos, aunque legítimos, es un arte, conciliar el orden del día con las distintas fuerzas políticas, es habilidad parlamentaria que ha desplegado el diputado Bojórquez Ruiz.

Hermanarse desde la campaña política que los llevó al Congreso local, mantiene a los diputados de MORENA y el PAS en una tensa calma, en una observación constante de unos con otros, en un respeto de las formas… aunque saben que en el fondo tienen sangre de distintos padres, saben que juntos son fuerza definitiva o tal vez insuperable, por eso hay una sinergia de inteligencias y voluntades.

Esto le conviene a los progenitores políticos de estas dos fuerzas que de momento tienen el control político. La experiencia es buena, pero la juventud trae ímpetu para construir la nueva realidad.