Por David Uriarte /
El fenómeno arrollador de MORENA en el 2018 se debió a la marca más que a los nombres. No siempre la gente vota por los partidos como no siempre vota por las personas.
La conciencia cívica de la sociedad se aclara poco a poco, hoy el votante escudriña la oportunidad, ve el nombre del partido y ve el nombre del candidato o la candidata.
Hay personas que se frotan las manos cuando escuchan el nombre de un líder social, inmediatamente preguntan ¿Por cuál partido?
Hay partidos que se fortalecen con el nombre de alguno de sus candidatos, otros se devalúan; hay candidatos que se fortalecen con cierto partido, otros se devalúan.
El caso de Miguel Enrique Calderón Quevedo, expresidente municipal de Navolato, más conocido como Miguel Calderón, mantuvo en su mente y en sus manos una serie de ofrecimientos de distintos partidos políticos a distintos cargos, sin embargo, en un examen de conciencia donde la honestidad de la decisión fue lo importante, se decidió participar como candidato a diputado local por el distrito once de Navolato.
El partido Verde es el refugio político de Miguel Calderón, todo indica que hará sinergia la marca del Verde con el nombre de Miguel Calderón.
El adagio reza “pueblo chico infierno grande”, esto significa que más temprano que tarde, algunos navolatenses habrán de expresar su beneplácito y otros su repudio, es lo esperado cuando la oferta política se multiplica como nunca antes, es decir, hoy habrá candidatos a diputados por MORENA y el PAS; por el PRI, PAN y PRD; por MC, FxM, RSP, PES, PT, y el Verde.
Miguel Calderón se ha mantenido al margen pero no ajeno de la política, por su sangre corre la vocación de servicio, su experiencia lo fortalece con una rentabilidad que el partido VERDE está capitalizando.
Él que quiere ganar debe estar dispuesto a perder, esto lo entiende bien Miguel Calderón, suficiente ha tenido con los golpes de la vida… Hoy se pone de pie y toma una decisión a pesar de estar en una zona de confort, en un empleo donde además de realizarse colabora para construir una sociedad sana. El nombre Miguel Calderón empezará a subir de tono después de Semana Santa.