Por David Uriarte /
Decían que Chalino Sánchez no cantaba muy bien, pero donde se presentaba, llenaba, lo mismo pasa con algunas instituciones de educación media superior y superior, en el caso de la Universidad Autónoma de Sinaloa, muchos la critican a pesar de ser egresados de ella. Lo cierto, es que en tiempo de inscripciones, hay unidades académicas cuya demanda supera con mucho la oferta, a veces en cinco minutos se acabaron los espacios, tal es el caso de la facultad de medicina, odontología, psicología, prácticamente todas las carreras del área de la salud.
Al revisar de manera objetiva y sin juicios de valor, la distribución del subsidio público ordinario por estudiante a las universidades públicas estatales en 2024, se puede encontrar (es información pública), que la asignación del recurso federal y estatal a la UAS fue de $60,558.65 por alumno (federal y estatal), mientras la Universidad Autónoma de Tamaulipas recibió $118,240.02 pesos por alumno, casi el doble que la UAS.
La calidad académica de la UAS está avalada por 142,481 alumnos, 79,449 de educación superior, y 63,032 de educación media superior, el interés de la sociedad por inscribir a sus hijos en las preparatorias y las distintas facultades, obedece fundamentalmente a dos cosas: la calidad de la educación y su costo.
Tener un hijo en el bachillerato o licenciatura en las escuelas privadas por no decir caras, cuesta entre treinta y cien mil pesos el semestre, con ese dinero, en la UAS, el estudiante cursa toda la carrera y puede que le sobre para darse unos gustitos personales.
Por eso hay tanta demanda en la UAS, por eso, gran parte de los padres de familia, incluso los que tienen solvencia económica para mandar a sus hijos a otras universidades privadas, prefieren la mezcla de calidad al mejor precio, así de sencillo.
Los ataques a la UAS sólo provienen de dos fuentes, el desconocimiento, o el dolo. La plataforma en transparencia y rendición de cuentas, y el portal de la subsecretaría de educación superior, en el rubro de subsidio ordinario 2024, ofrece información precisa en pesos y centavos. Hace una comparación donde se ubica precisamente la UAS por debajo de la media, es decir, es de las universidades que reciben menos dinero por alumno que otras 24 universidades. También hay que precisar, hay diez universidades públicas que corren una suerte distinta por recibir menos dinero por alumno que la UAS.