Por David Uriarte /

La cuna del comercio alimenticio en Culiacán y municipios circunvecinos es la Central de Abastos de Culiacán. En su momento fue un polo de desarrollo económico, hoy la sobrevivencia es el sello que los distingue, un giro comercial que oferta múltiples productos y servicios, un mercado que satisface la demanda básica de una sociedad en constante expansión.

Los relevos generacionales ya llegaron a la central de abastos, son jóvenes que nacieron y crecieron mientras sus padres abrían sus negocios desde las tres de la mañana, estos jóvenes profesionistas lograron hacer una mezcla entre la experiencia comercial de sus padres, y el conocimiento adquirido en las aulas, hoy, el mercado de abastos de Culiacán quiere salir de su inercia para competir con las grandes cadenas comerciales nacionales e internacionales, y estar a la altura de una ciudad de más de un millón de habitantes.

Gobernantes van y gobernantes vienen, todos visitan la central de abastos cuando andan en campaña, después ni los reciben en sus oficinas, servicios básicos como aseo y limpia, alumbrado público, agua potable y drenaje sanitario, rehabilitación y mantenimiento de accesos, y de la seguridad pública; ni hablar.

Una luz de esperanza reposa sobre la mesa directiva de la central de abastos, su presidente Sergio Macario López, junto con Heriberto Vlaminck Ley, Gilberto Rodríguez Chávez, Alfonso Padilla Rodríguez, y Enrique López Félix, buscan hacer mancuerna con alguien que, desde su área de influencia, pueda entender, y gestionar para resolver los problemas crónicos de servicios básicos que enfrenta el maduro mercado de abastos de Culiacán.

Ayer fue un buen día para el destino de la central de abastos, en desayuno con el presidente de la Comisión de Hacienda Pública y Administración, Diputado Jesús Alfonso Ibarra Ramos, los jóvenes empresarios hablaron de tú a tú, no solo por la coincidencia de edades con el diputado, sino porque ese fue el tono que acordaron ambas partes para poder estar en la misma sintonía.

Al diputado Ibarra no le costó trabajo entender a los empresarios ya que él viene de una familia de empresarios y de alguna manera conoce la dinámica entre los comerciantes y el gobierno. Fue un encuentro productivo, hasta de los expresidentes municipales se habló, incluso se tocó el tema del predial de los campos de golf.