Por David Uriarte /
Las cosas en materia de política exterior han estado relativamente bien, sólo algunos exabruptos que al parecer no han tenido consecuencias económicas, y políticamente más o menos. La relación de México con Estados Unidos, se ha mantenido con alfileres desde el caso del agente de la DEA asesinado en México.
De alguna manera, el caso Camarena ha sido el karma de Rafael Caro Quintero, ya en libertad, los gringos buscaron su recaptura con fines de extradición. Tres temas han sido los más importantes en la relación bilateral México-USA, el tema migratorio, el narcotráfico, y el comercio.
En el tema migratorio, México se ha convertido en la vía de acceso de otros países rumbo al sueño americano, con la llegada de Trump a la presidencia nuevamente, las hostilidades en la frontera se recrudecerán, Estados Unidos retomará el proyecto del muro fronterizo y tratará de condicionar a México en otros temas.
En el tema del narcotráfico, desde hace cincuenta años, los estadounidenses tienen un pie en México, los agentes de la DEA siempre han estado en búsqueda de los narcotraficantes más significativos para ellos; primero con la extradición de uno, y ahora con la llegada de dos más, la inteligencia es una de sus herramientas favoritas cuando de lograr sus objetivos se trata.
Desde Carlos Salinas y el tratado de libre comercio, México ha mantenido una relación comercial con Estados Unidos, el tema de los aranceles y la revisión del tratado cada cierto tiempo, ha permitido el intercambio comercial y con ello el fortalecimiento de las relaciones políticas entre Canadá, Estados Unidos y México. Todo indica que Trump, le tiene puesta la mirada a los chinos, esto se convertirá en un dolor de cabeza para México.
Junto con la migración, el narcotráfico, y el intercambio comercial, las remesas han aumentado en México, la simbiosis no se puede evitar, aunque existan diferencias como las del embajador Ken Salazar y el gobierno mexicano.
Es probable que, con la llegada de Trump a la presidencia, el embajador Ken Salazar sea removido de México, sin embargo ¿Qué sabe el embajador del caso del dueto famosos que llegó a su país? ¿Por qué se atreve a evidenciar al expresidente López Obrador?
Algo sabe, que la mayoría de los mexicanos desconocen y tal vez gran parte de los empleados del gobierno también.
La información que han recabado puede ser dinamita.
