Hace tiempo llegaron a mis manos estas frases de San Agustín de Hipona, Padre de la Iglesia Católica. Nace en el año 354 y muere en el 430. Fue un hombre de extraordinaria inteligencia y escribió incansablemente. Se denominaba “el hijo de las lágrimas de su madre”.

Ser padre es una tarea que se aprende, sabiendo siempre que hasta para serlo ¡hay límites!

Ser padre es una tarea que se aprende, sabiendo siempre que hasta para serlo ¡hay límites!

Comparto con ustedes sus frases, de gran sabiduría, que nos descubren los límites en nuestra tarea de ser padres:

  • Te di la vida, pero no puedo vivirla por ti.
  • Puedo enseñarte muchas cosas, pero no puedo obligarte a aprender.
  • Puedo dirigirte, pero no responsabilizarme por lo que haces.
  • Puedo instruirte en lo malo y lo bueno, pero no puedo decidir por ti.
  • Puedo darte amor, pero no puedo obligarte a aceptarlo.
  • Puedo enseñarte a compartir, pero no puedo forzarte a hacerlo.
  • Puedo hablarte del respeto, pero no te puedo exigir que seas respetuoso.
  • Puedo aconsejarte sobre las buenas amistades, pero no puedo escogértelas.
  • Puedo educarte acerca del sexo, pero no puedo mantenerte puro.
  • Puedo platicarte acerca de la vida, pero no puedo edificarte una reputación
  • Puedo advertirte acerca de las drogas, pero no puedo decir “no” por ti.
  • Puedo exhortarte a la necesidad de tener metas altas, pero no puedo alcanzarlas por ti.
  • Puedo enseñarte acerca de la bondad, pero no puedo obligarte a ser bondadoso.
  • Puedo amonestarte en cuanto a errar, pero no puedo hacerte una persona moral.
  • Puedo explicarte cómo vivir, pero no puedo darte vida eterna.
  • Puedes estar seguro de que me esforzaré hasta el máximo por darte lo mejor de mí, ¡porque te quiero! Pero lo que hagas de tu vida, depende de Ti… aun cuando siempre esté junto a Ti, las decisiones las tomarás Tú.
  • Solo le pido a la Vida que te ilumine para que tomes las correctas.