Por David Uriarte /
Querer llevar a la vida real las escenas ‘peliculescas’ de acción, es una sinrazón, más cuando se vive un clima de inseguridad.
Las ciudades o comunidades donde prevalece el crimen organizado, son blanco y refugio de conductas sociopáticas cuyo precio se paga con sangre, el miedo social se deriva de los hechos, las acciones abarcan lo inimaginable cuando de delitos se trata.
Gobiernos van y gobiernos vienen, todos con las mejores intenciones, tanto el gobierno federal, estatal y local, suman estrategias en busca de disminuir la incidencia delictiva.
Ningún gobierno asume el fracaso como opción, aunque más fracasadas no pueden estar las estrategias, en materia de seguridad pública, su eficacia se mide por el número de delitos, desde los delitos patrimoniales hasta los de alto impacto como el homicidio doloso, el secuestro, y la extorsión, mantienen al gobierno ocupado y a la sociedad con miedo, ni el gobierno logra resolver el fenómeno delictivo, ni la sociedad logra sentirse segura.
Desde Rudy Giuliani, alcalde de la ciudad de Nueva York de 1994 a 2001, hasta el super policía mexicano Omar García Harfuch en 2024, todos los actores encargados de la seguridad pública, han intentado inhibir la incidencia delictiva, unos de una manera y otros de otra, sin embargo, ni en Nueva York ni en México se ha logrado el objetivo y la sociedad vive presa de la inseguridad y el miedo.
Son más las historias que se tejen alrededor del Secretario de Seguridad y Protección Ciudadana de México, Omar García Harfuch, que la verdadera realidad, muchos lo han entronizado en forma de broma como el “Batman de Ciudad Gótica-Culiacán”, las fantasías llegan al terreno paranoico inventando superpoderes o acreditándole habilidades de un ‘superhumano’, sin embargo, es evidente que algo está fallando en la estrategia para contener el indicie delictivo en Sinaloa, o simplemente la sociedad debe esperar el tiempo necesario para ver resultados, mientras tanto, criminales, policías, e inocentes siguen muriendo por las balas asesinas.
En las películas de acción el actor Bruce Willis, encarna al super policía de Nueva York, John McClane, no hay enemigo que prevalezca ante la sagacidad y eficiencia de McClane, “Duro de matar” se llama la serie de películas, pero las películas son películas.
La vida real, es totalmente diferente, se requiere algo más que simular un McClane.