Por David Uriarte /

Los nubarrones de problemas en Sinaloa se han presentado desde el año pasado, se incubaron poco a poco y se están recrudeciendo, lo político no puede dejar nada fuera de su jurisdicción, la gobernabilidad incluye el desempeño armónico de todas las actividades o procesos sociales, partidistas, e institucionales, cuando esta armonía se pierde el riesgo de ingobernabilidad es inminente.

La historia reciente en Sinaloa registra una alianza del partido en el poder con un partido político local, después del triunfo electoral, la designación del Secretario de Salud fue motivo de preocupación oficial, la decisión fue correr a la ficha política incrustada en un gobierno.

Meses después, el exsecretario de Salud se incorpora de lleno a su liderazgo partidista y retoma su actividad recorriendo los municipios, conformando estructura política en víspera del proceso electoral que se avecina.

De manera sorpresiva, el líder del PAS y su familia se vieron exhibidos como delincuentes evasores del fisco, y la Universidad Autónoma de Sinaloa como un nido de irregularidades donde prevalece el abuso de autoridad, donde hay una asociación evidente con cuatro rectores -uno en función y tres exrectores-, que forman parte de la ecuación que dio origen a la tormenta perfecta en Sinaloa.

En orden cronológico, Rubén Rocha, Héctor Melesio Cuén, Juan Eulogio Guerra, y Jesús Madueña, el primero de ellos hoy gobernador, el segundo, líder del PAS, el tercero, Rector del periodo inmediato anterior, y el cuarto, Rector en funciones, esta articulación de la historia local muestra hilos de contacto entre los actores de la tormenta perfecta.

Poco a poco la concatenación de fuerzas políticas fue madurando, los sentimientos o resentimientos arrastrados por los actores tomaron su cauce y se fortalecieron dando como resultado el conflicto UAS-Gobierno.

A una semana de iniciar el trabajo académico en las aulas donde llegarán más de cien mil estudiantes, el rector está vinculado a proceso e impedido a salir del país, este mensaje impacta en la comunidad universitaria, en los padres de familia y en la sociedad en general, aquí aplica el principio de que los pleitos ni ganados son buenos.

Lo que se siembra se cosecha, al parecer la cosecha ya empezó, la pregunta obligada es ¿Esta tormenta perfecta, afectará la percepción social, afectará el proceso electoral del 2024?