Por David Uriarte /

Batequitas y Batopito son dos comunidades pertenecientes al municipio de Badiraguato Sinaloa, en la primera nació el gobernador electo Rubén Rocha, y en la segunda Óscar Lara Salazar.

Sin duda Badiraguato es un municipio de proyección mundial, lugares como La tuna, La noria, Huixiopa, Babunica, y personajes como Raúl Valenzuela Lugo, el General Teófilo Alvares Borboa, Abelardo Medina Díaz, el Dr. Héctor Castro Abitia, Rubén Rocha Moya, Héctor Melesio Cuén Ojeda, y Óscar Lara Salazar, son una muestra de los lugares y los talentos de Badiraguato.

Corridos, valientes, poetas, médicos, intelectuales y gente inteligente, son el rostro de un municipio serrano que se volvió famoso en la década de los cincuentas después de la segunda guerra mundial. Volvió a tener un repunte en el escenario nacional en la década de los setentas con la famosa “Operación Cóndor”… Y no se diga el salto a la pantalla grande y chica, documentales, libros, historias, fabulas por el toque indeleble del narcotráfico y sus capos.

Hoy, familiares, amigos, y conocidos de Óscar Lara Salazar, le dimos la despedida, el cariño y la admiración quedó registrada en el desfile que desde el día de ayer por la tarde se presentó en las instalaciones de la casa funeral… coronas, arreglos y muestras de solidaridad con la familia fueron más que evidentes. Los comentarios eran coincidentes “se nos adelantó un amigo, un buen hombre, un historiador, un hijo, hermano y padre ejemplar”… En fin, comentarios que sólo aparecen en estos momentos del exterminio de la vida y la esperanza del reencuentro.

El luto ante irreparable perdida se extiende más allá de la familia, abarca sin duda el ámbito de la academia, especialmente la historia, y la política, no hay espacio para recorrer en unos renglones la vasta experiencia de Óscar en distintas áreas del quehacer político, ese es otro tema, hoy la reseña tiene su raíz en la pérdida del ser humano y el luto de Batopito y Badiraguato.

Dicen que las personas se vuelven buenas en su muerte, Óscar era bueno desde mucho antes de su muerte, su ausencia sólo será el pretexto para aquilatar y dimensionar su paso y su contribución a su rancho, su municipio, su estado y su México.