Por David Uriarte / 

La vida partidista en Sinaloa tendrá mucha actividad este fin de semana, moverá emociones, sentimientos, recuerdos, estados de ánimo y por supuesto dará para especulaciones, fantasías y mitotes.

Las campañas de lodo han estado tranquilas, aún no salpican lo suficiente como para llegar al escándalo, sin embrago ya se percibe el tono grave con tendencia a lo agudo.

Rosa Elena Millán Bueno, Gerardo Vargas Landeros, Jesús Estrada Ferreiro, Luis Guillermo Benítez Torres y Héctor Melesio Cuén Ojeda, estarán siendo requeridos en la toma de decisiones. La primera en el partido emergente Fuerza por México, y los segundos en MORENA.

Gerardo Islas Maldonado y Mario Delgado Carrillo, estarán este sábado en Culiacán dando claridad a las especulaciones y malos entendidos; lo principal será la definición de la candidatura común de MORENA y el PAS rumbo a la gubernatura.

Gerardo Islas, a las 12:00 toma protesta a los integrantes del Comité Directivo Estatal de Fuerza por México en Sinaloa y a su vez protesta a su candidata a la gubernatura; Mario Delgado tendrá varías reuniones y por la tarde se darán a conocer las decisiones internas y en su caso los nombres de los candidatos a las principales alcaldías de Sinaloa por MORENA.

Mario Delgado y Gerardo Islas expertos en prestidigitación, darán buen espectáculo y pondrán carne al caldo político para una buena sazón.

Sin descuidar sus tareas, los miembros de la alianza “Va por México”, estarán con un ojo al gato y otro al garabato, es decir, buscarán las fuentes confiables de información que les oriente por donde van las decisiones, y con esto, como ajustar sus estrategias de campaña.

Los amigos y enemigos de los distintos actores políticos ya tienen suficiente información para construir tigres de papel, o castillos habitables por los duendes de la especulación.

Como dice el Presidente de todos los mexicanos, “el pueblo sabio” tiene en sus manos el rumbo y destino de las elecciones más concurridas de la historia.

La tromba política que se aproxima dejará una lección a los confiados y otra a los que piensan que mandan, con esto se cumple el dicho “del plato a la boca se cae la sopa”.