Por David Uriarte /

Hace 17 años, estando al frente de la Facultad de Derecho de la UAS, el doctor Gonzalo Armienta Hernández inició una gestión por reivindicar los derechos de los pueblos originarios, en ese tiempo se puso a consulta la ley indígena, la consulta se hizo en las comunidades indígenas del norte, centro y sur del estado, después se presentó al Congreso del Estado donde quedó archivada por 15 años.

Después, se organizaron cursos de intérpretes y traductores indígenas con recursos de Finlandia, todo esto en las instalaciones de la facultad de Derecho de la Universidad.

Gonzalo Armienta participó en la elaboración de la ley orgánica de la Universidad Autónoma Indígena de México derivada del amparo en contra de la ley orgánica de la Universidad Intercultural. También talló el lápiz el Doctor Gonzalo en lo relativo a al proyecto de reforma a la Constitución de Sinaloa para la participación de los pueblos originarios mediante usos y costumbres en la elección de diputados y regidores.

En la mira del Gonzalo y su grupo de investigadores está hacer de Mochicawi un municipio autónomo indígena.

Gonzalo Armienta Hernández, no ha dejado de participar en busca de mejorar las condiciones laborales y educativas de aquellos indígenas que arriban a Sinaloa, especialmente a los campos agrícolas, siempre busca acercarlos al conocimiento.

En esa dinámica me tocó participar en un programa que coordinaba Gonzalo Armienta en la sindicatura de Villa Benito Juárez, del municipio de Navolato, ahí fuimos a impartir platicas relativas a la educación y la salud sexual, acompañados de abogados egresados de la Facultad de Derecho que ya estaban cursando su maestría, todos ellos originarios de los estados de Guerrero, Oaxaca y otros estados que ven en Sinaloa la tierra prometida desde el punto de vista de la economía.

Lo curioso, por decir lo menos, es que el doctor Gonzalo Armienta recibe reconocimientos y apoyos de universidades extranjeras mientras los sinaloenses y sus instituciones le regateamos un espacio de difusión a su noble labor.

El derecho y las motos son las principales pasiones terrenales de Gonzalo; dije principales.