Por David Uriarte /

¿Cuánto cuesta el dolor? Le experiencia del dolor crónico como en la fibromialgia, migraña y dolor de espalda, suman 1500 millones de personas en el mundo según las estadísticas; incluyendo 100 millones de estadounidenses que pagan en total 500,000 millones de dólares al año para su tratamiento según cifras hasta el año 2017.

Si al costo de los analgésicos y tratamientos relativos al dolor se le sumala productividad pérdida, entonces la suma llega a 635,000 millones de dólares (mdd) cada año.

Al dividir los 635,000 mdd entre los 365 días del año, la cifra es de 1, 740,000 (un millón setecientos cuarenta mil dólares) por día, lo que significa 72 mil dólares por hora, más o menos 22 mil 800 pesos por minuto.

La epidemia mundial del dolor crónico se ha convertido en un verdadero negocio para la industria farmacéutica, en casi todos los hogares del mundo existen por lo menos tres medicamentos: analgésicos, antiinflamatorios y antiácidos.

El diagnostico de dolor agudo o crónico, en parte, se hace cuando escuchas a las personas hablar de paracetamol, ibuprofeno, naproxeno, diclofenaco, como hablar de comida o de ropa.

Lo mismo pasa con los antiácidos estomacales, las personas hablan de Alka-Seltzer, sal de uvas Picot, omeprazol, lansoprazol, esomeprazol, pantoprazol, y decena de nombres comerciales con la misma indicación.

La venta de analgésicos, antiinflamatorios y antiácidos, representan miles de millones de dólares de ganancia a la industria farmacéutica, y aunque el 99% de ellos no producen adicción ni necesitan receta para adquirirlos, hay personas que afirman no poder dormir si no se toman su respectiva pastilla para el dolor o la acidez estomacal.

Se puede afirmar que el costo del dolor es doble, por un lado es monetario y por otro psicológico.

La economía se afecta cuando el adolorido no cuenta con un esquema de salud pública o el beneficio del servicio médico vía patronal, y el impacto psicológico va desde el malestar propio del tipo de dolor, hasta la incapacidad laboral o social que lo limita y aísla.

Hay personas a quienes les duele todo, desde la cabeza hasta los pies, pasando por las cavidades torácicas y abdominales, articulaciones y músculos. El dolor cuesta.