Por David Uriarte /

Las administraciones municipales con su autonomía revelan dos cosas: el carácter del gobernante, y el carácter de los gobernados.

Los recuerdos se relacionan directamente con dos cosas: los hechos y su significado.

Hubo un presidente municipal de Culiacán a quien se le recuerda porque se uniformaba como policía y comía menudo en el mercadito Buelna; a otro se le recuerda porque se le asocia con la quema del Palacio Municipal en 1989; otro es recordado por los muñecos emblemáticos, los famosos “morrines”.

Otro es recordado por haber sido dos veces Presidente Municipal en periodos cortos; otro por su simpatía y su sonrisa permanente, en fin, cada gobernante municipal deja su sello, su recuerdo y su historia.

Si el recuerdo obedece a los hechos y su significado, entonces, Jesús Estrada Ferreiro será recordado por muchas cosas: es el primer presidente municipal de Culiacán cuyo gobierno será de seis años por su reelección, así se escribe la historia.

Estrada Ferreiro es conocido en el medio de la abogacía porque fue subprocurador en el gobierno de Antonio Toledo Corro, abogado postulante por más de 30 años, a partir de 2013 candidato a diputado por el distrito 13, en 2015 candidato plurinominal a diputado federal, un año después candidato al Gobierno del Estado, y en 2018 candidato a la Presidencia Municipal de Culiacán por MORENA.

El carácter de Estrada Ferreiro rompe los esquemas tradicionales o por lo menos es diferente a sus pares anteriores. Se ha confrontado con los medios, con el sindicato de trabajadores del Ayuntamiento, con los gobernadores en turno, con diputados, con un grupo de jubilados… ha roto esquemas de trabajo.

Actualmente, el ‘ojo del huracán’ es lo relativo a las tablas catastrales, el cobro del predial y el descuento a jubilados y pensionados, como en su momento fueron los Certificados de Promoción Fiscal, y al parecer hasta le quieren ‘cocinar’ un juicio político.

Hay acciones cuyo impacto se valora en el tiempo, aunque de momento no sean populares.

Sin duda Jesús Estrada Ferreiro será recordado por muchas cosas, menos por no hacer nada por Culiacán, el asunto es de forma, no de fondo.