Por David Uriarte /

La historia describe a Margarita Ester Zavala Gómez del Campo, como una mujer inteligente, dirigente de la organización México Libre y esposa del expresidente Felipe Calderón; y ahora candidata de Acción Nacional (PAN) a una diputación federal por el distrito 10 de la alcaldía Miguel Hidalgo en la Ciudad de México.

Margarita Zavala tiene amigos en muchos países del mundo y en México ni se diga… en Sinaloa tiene un gran amigo, compañero de la LIX Legislatura de 2003 a 2006, también fue diputada local de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal de 1994 a 1997.

Quienes la conocen aseguran dos cosas: que es una intelectual y un pilar de familia. En la búsqueda de sus aspiraciones políticas, Margarita Zavala se reúne con personas representativas, en este caso le tocó el turno a una sinaloense radicada en la ciudad de México desde hace cuarenta años, Martha Delia Félix Estrada. Una mujer que se abrió paso en las épocas difíciles para una familia tradicional, de padres rurales, campesinos, trabajadores y por supuesto de familia numerosa. Martha Delia ocupó cargos modestos pero representativos en la Dirección General del IMSS, en la Secretaría de pesca, y finalmente se decidió por ser empresaria de la industria restaurantera.

La sinaloense con su gran ‘don de gentes’, actualmente ocupa un cargo relacionado con la seguridad de Polanco, precisamente en la otrora Delegación Miguel Hidalgo, donde además es Vicepresidenta de la Coalición Unidos por Polanco.

Así como la sinaloense Martha Félix, hay muchos más que han fortalecido con su trabajo la economía de la CDMX. La Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (CANIRAC), organismo al que pertenece Martha Delia Félix y forma parte de la Comisión de Seguridad y Vigilancia de Polanco, es una organización lastimada por la contingencia sanitaria, donde empleados y dueños de restaurantes ya no aguantan lo duro, sino lo túpido.

Mujeres como Margarita Zavala y la sinaloense Martha Félix, pueden darle un giro a las condiciones precarias de la economía y la seguridad pública que afectan a la zona restaurantera de Polanco, de la CDMX, y del país.