Por David Uriarte /

Según la Real Academia Española, despanzurrar significa aplastar o romper algo reventándolo de modo que se vea su interior. Eso es lo que ha pasado o está pasando con algunos servidores públicos, políticos que la sociedad les está viendo su interior, su forma de actuar, aquello que estaba escondido, el acceso a la información y la Auditoria Superior del Estado (ASE), han descubierto parte de su actuar cuando han tenido la confianza del pueblo y el poder de gobernar.

Para evitar los procedimientos jurídico-administrativos engorrosos o que impliquen la intervención de otros poderes, el ejecutivo estatal plantea quitar el fuero a funcionarios estatales, aunque los presidentes municipales no son funcionarios estatales como tal, gozan de fuero constitucional y esto los protege por un lado, y complica por otro, el actuar de la Fiscalía cuando se presume de actos violatorios a derechos humanos, uso indebido del poder, o cualquier otra conducta que configure delito como tal.

Los presidentes municipales están cuidando el desempeño de sus funcionarios, servidores públicos que tienen aspiraciones políticas o simpatizan con tal o cual candidato, ya sea del partido en el poder o de la oposición.

El primero en pronunciarse para evitar malentendidos o conductas que pudieran ser sancionadas por las autoridades electorales, o vistas como actos anticipados de campaña, es Gerardo Vargas Landeros, titular del gobierno municipal de Ahome, político de experiencia, operador de procesos electorales y aspirante a fortalecer las simpatías rumbo al 27 con escala en el 24.

Los cambios realizados por el gobernador Rocha en la Secretaría de Turismo, presagian la fortaleza del gobierno en la renovación de la titularidad de una de las secretarías más importante para el desarrollo económico del estado, pero también, presagia el inicio de una lucha del “Químico” Benítez por demostrar su inocencia ante las acusaciones que le finca la Fiscalía del estado.

Cierto o falso, lo primero lo tendrá que demostrar quien lo acusa, lo segundo tendrá que demostrarlo el expresidente municipal de Mazatlán.

El número de políticos despanzurrados puede aumentar, por lo pronto y mientras los tribunales deciden, el expresidente municipal de Culiacán vive esta condición, conocer la diferencia entre escándalo, revancha, y el cumplimiento de la ley, es lo que espera la ciudadanía.