Una hermosa cría de jaguar negro (o pantera negra), fue presentada en el Zoológico de Culiacán. El ejemplar tiene 5 semanas y nació luego de un periodo de gestación de 100 días; sus papás son “Sombra” y “Macario”, que lograron concebir después de un año de cortejo.
Actualmente el cachorro está en etapa de “destete”, es decir, se le da una fórmula especial para pantéridos y tras cumplir el mes se le empieza a dar comida sólida (croquetas especiales para felinos, pollo molido y suplemento de calcio).
El felino alcanzará su adultez a los 3 años y medio, con un peso aproximado de hasta 80 kilogramos y en esa etapa podrá reproducirse.
En ese sentido, García Heredia, director del Zoológico de Culiacán, destacó: “Hoy en día, gracias a los zoológicos estamos trabajando en la recuperación de esta especie y la cría que hoy estamos presentando es prueba de ello. Los jaguares que en vida silvestre tienen expectativas 10 años, pero en los zoológicos, que son centros de investigación, conservación y reproducción de animales, ellos pueden rebasar los 20 años”.
Por lo general los jaguares son de color amarillo-anaranjado con manchas negras, sin embargo el espécimen nacido es negro y de ojos azules, tiene una particularidad frecuente en la especie llamada melanismo, que es un exceso de pigmentación y por lo cual son conocidos como «panteras negras».
Próximamente se lanzará una convocatoria para que los niños sinaloenses puedan ponerle nombre a este cachorro de jaguar, con el que el Zoológico de Culiacán hace historia en la conservación, reproducción y repoblación de animales en peligro de extinción.
Esta es una importante contribución a la repoblación de especies que están actualmente en peligro de extinción, como el jaguar, que es el felino más grande de América y también un emblema para los mexicanos, expresó el director de esta institución paramunicipal, Ing. Diego García Heredia.
De acuerdo al Censo Nacional del Jaguar, el año pasado había 4 mil 818 jaguares en México y la cifra ha aumentado en 20% respecto al 2018, lo cual atribuyó en parte a la tarea de repoblación que hacen los zoológicos públicos y privados, así como a la educación ambiental y concientización que realizan los parques zoológicos hacia la sociedad.
El jaguar está riesgo de extinción y su territorio ha sido invadido por la mancha urbana, además de la caza indiscriminada de éstos sigue, muy a pesar de que la cacería de jaguares está vedada desde 1987.
