Por David Uriarte /
¿Qué pasaría si un pasajero se infarta en pleno vuelo de La Paz a Culiacán, o de la Ciudad de México a cualquier otra ciudad? Y, ¿qué pasaría si el infartado es el piloto?
En caso de desastres, las corporaciones policiacas civiles y militares juegan un papel esencial. Si bien es cierto que el sector salud es el responsable de la atención médica preventiva y curativa, también es cierto que el contexto social genera condiciones de violencia propia de una contingencia que pone en peligro la vida colectiva; ahí es donde toma relevancia la presencia de la Policía Municipal para garantizar la seguridad pública.
El secretario de Seguridad Pública y Tránsito Municipal, Óscar Guinto Marmolejo, mantiene a la corporación en estado de alerta, están trabajando 12 por 24 horas, hay que cuidar y atender a la sociedad, pero ante la contingencia sanitaria, los policías corren riesgo de contaminarse mucho más que la población en general, el trabajo de ellos es esencial, ellos no se pueden quedar en casa.
Un fenómeno de alguna manera esperado es el aumento de la violencia intrafamiliar, las llamadas al 911 se incrementan, pero al llegar los policías al domicilio, sucede que la persona que llamó a la policía no fue la víctima, fue la vecina, la madre, los hijos, o algún samaritano acomedido… O sucede que el violento ya se retiró del domicilio, y la víctima no acepta ser llevada a un refugio o interponer la denuncia correspondiente.
El resguardo domiciliario ya está cobrando sus víctimas, las emociones cuando no se pueden contener salen en forma de impulsos verbales o físicos. La falta de elementos en todas las corporaciones policiacas no es novedad, la contingencia sería más letal si las autoridades mandan a resguardo domiciliario a los policías con diabetes, hipertensos, con colesterol y con sobrepeso, pero el riesgo de los policías con estas enfermedades es más alto al andar patrullando o asistir a lugares concurridos.
Comenta el secretario Guinto Marmolejo que las indicaciones a todos los elementos de la corporación es extremar precauciones para evitar la contaminación del virus, sin embargo, el riesgo de contaminación es latente.