Por David Uriarte /
La cercanía de Andrés Manuel López Obrador con los morenistas sinaloenses, tiene su origen en el tiempo, parte de una relación de activistas, de los cuales, muchos se han quedado en el camino, y otros, como Luis Guillermo “El Químico” Benítez Torres, y Jesús Estrada Ferreiro, han mantenido el paso en el maratónico camino de una incipiente responsabilidad política.
Hay quienes afirman que el verdadero amigo de AMLO en Sinaloa es Amos Lugo Vega, otro químico, por cierto. Sea quien sea el amigo o los amigos más cercanos de AMLO en Sinaloa, la verdad señala de momento a los presidentes municipales de Mazatlán y Culiacán como bastiones del morenismo en Sinaloa.
Muchos dirán, y Eliazar Gutiérrez de Navolato, Aurelia Leal López de Guasave, o Billy Chapman de Ahome; todos tienen un lugar en la escala de rentabilidad política de MORENA.
Hay quienes afirman que alguno de los presidentes municipales de MORENA no termina el periodo para el que fue electo, otros afirman que todos terminarán muy raspados o devaluados, dígase lo que se diga, sólo sus acciones u omisiones serán la nota definitiva.
Tanto en químico Benítez como el abogado Estrada Ferreiro mantienen una cercanía relativa con el Presidente López Obrador y la estructura de su partido, ambos viajan con frecuencia a la Ciudad de México en búsqueda de apoyos para sus municipios, ambos pueden toparse pronto con el nuevo presidente de MORENA en Sinaloa y no les extrañe que pudiera ser un ex panista, o un priista.
La presencia y cercanía de Benítez y de Estrada Ferreiro en la reciente visita de AMLO por Sinaloa, fue la primera medición de simpatías, de aquí se desprende la competencia para sus aspiraciones legítimas del 2021.
La relación de Estrada Ferreiro con Jesús Vizcarra no es nueva ni fortuita, tanto el origen del primero como el negocio del segundo, se remontan al siglo pasado y a la sindicatura de Culiacancito donde ambos establecieron lazos e intercambios de favores.
No se sabe si será un lastre o una ventaja este tipo de relaciones de Estrada Ferreiro, lo que sí se sabe, es la competencia de Benítez y él, por los afectos de AMLO.
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